Si hay una voz que suene en todos los españoles cuando pensamos en cine, esa es, sin duda, la de Constantino Romero. El presentador, locutor y actor de doblaje español nos deleitó durante años con su profunda voz con la que dio vida a cientos de personajes, consiguiendo enamorar al mundo como Mufasa y atemorizarlo como Darth Vader.
Diez años después de la muerte de Romero, hacemos un repaso de por qué nos dejó tantísima huella este actor, y de por qué sigue hoy día considerado como la voz de nuestro país. Su voz profunda y su presencia carismática en la pantalla lo hicieron destacar en la industria cinematográfica y televisiva durante más de cuatro décadas. Y es que, desde su debut en 1972, Constantino dejó una huella imborrable en el mundo del doblaje, y nos enseñó a valorar esta profesión.
Siempre estará en nuestros oídos
Nacido en Albacete, España, Constantino Romero comenzó su carrera en la radio a los 16 años. Más tarde, se mudó a Madrid para perseguir su sueño de convertirse en actor de voz. A partir de entonces, trabajó en numerosas películas, series de televisión, anuncios y videojuegos, prestando su voz a personajes icónicos que han dejado huella en el imaginario colectivo.
Uno de los trabajos más destacados de Constantino fue su interpretación de Darth Vader en la trilogía original de Star Wars. Su voz profunda y autoritaria le dio al personaje un tono de misterio y amenaza que se convirtió en su marca registrada. Incluso después de la muerte de David Prowse, el actor que interpretó el cuerpo del personaje, la voz de Constantino sigue siendo la que los fans asocian con el villano más icónico de la franquicia.
Además de Darth Vader, Constantino fue la voz de otros personajes memorables, como Arnold Schwarzenegger en Terminator, Clint Eastwood en Harry el sucio, Morgan Freeman en Cadena perpetua, y muchos más. Su capacidad para adaptarse a diferentes géneros y estilos lo convirtió en uno de los actores de doblaje más versátiles de su generación.
Sin embargo, Constantino no se limitó solo al doblaje. También trabajó en teatro y televisión, interpretando personajes que le permitieron explorar su faceta más dramática y emotiva. Entre sus papeles más destacados se encuentra el de la voz en off en Blade Runner.
Pero lo que realmente hizo a Constantino destacar fue su personalidad fuera de la pantalla. Su sentido del humor, su humildad y su capacidad para conectar con el público lo convirtieron en un referente para muchos actores jóvenes que querían seguir sus pasos. Además, su compromiso con la formación y el perfeccionamiento del doblaje en España lo convirtieron en un defensor de la profesión y en un modelo a seguir para muchos otros profesionales.
La muerte de Constantino en mayo de 2013 dejó un vacío en el mundo del doblaje y del entretenimiento en general. Pero su legado como actor de voz y como ser humano sigue vivo en la memoria de todos aquellos que tuvieron la suerte de conocerlo o de disfrutar de su trabajo.
Sin duda, siempre nos quedarán frases icónicas de Romero como “Yo soy tu padre”, “Yo he visto cosas que vosotros no creeríais“, “Sayonara Baby” o “Algún día, Simba, el sol se pondrá en mi reinado y ascenderá siendo tu el nuevo el nuevo rey”. Dicen que de lo primero que nos olvidamos de alguien cuando muere es de cómo suena, pero en el caso de Romero sonará para siempre en nuestros oídos.
Algunos de los enlaces añadidos en el artículo forman parte de campañas de afiliación y pueden representar beneficios para Softonic.
